¿Tú piensas que te quiero por hermosa,
Por tu dulce mirar,
Por tus mejillas de color de rosa?
Sí, por eso y por buena, nada más.
¿Que entregada a la música y las flores,
No aprendes a danzar?
Pues me alegra, me alegra que lo ignores;
Yo te quiero por buena, nada más.
¿Que tu ignorancia raya en lo sublime,
De Atila y Gengis-Khan?
¡Qué muchacha tan ciega!... Pero, dime:
Si lo supieras, ¿te querría más?
de Rafael Obligado